"Llovían vasos de cristal", la actuación más incómoda que vivió Manolo Sarriá con el dúo Sacapuntas

Historias de la tele

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Juan Rosa y Manolo Sarriá en la Navidad de 2001 en Canal Sur, como los Sacapuntas, flanquean a otro reconcido paisano malagueño, Chiquito
Juan Rosa y Manolo Sarriá en la Navidad de 2001 en Canal Sur, como los Sacapuntas, flanquean a otro reconcido paisano malagueño, Chiquito / RTVA
Francisco Andrés Gallardo

21 de enero 2025 - 09:05

El malagueño dúo Sacapuntas fue uno de los emblemas del humor para todos los españoles a mediados de los años 80 cuando se convirtieron en la pareja más popular a raíz de sus apariciones semanales en el Un, dos, tres, con Mayra Gómez Kemp. Chicho Ibáñez Serrador les fichó en un casting en el Casino Bahía de Cádiz, en El Puerto de Santa María. Juan Rosa, fallecido en 2002, y Manolo Sarriá, actual presentador de Atrápame si puedes en Canal Sur, se conocieron tras un concurso de chistes y formaron una 'extraña' pareja que, vestido de toreros, arrancaban la carcajada nacional en el Un, dos, tres que había regresado a la noche de los viernes en 1986 tras un periplo en los lunes.

La dupla se convirtió en una aparición frecuente en los espacios de humor de TVE, Canal Sur y ya en la década de los 90 en Telecinco (con VIP Noche como una nueva ventana de reaparición estelar) o en Antena. Sus latiguillos "¿Cómo estaba la plaza?... ¡Abarrotaaaá!", "22, 22, 22", "iiiji... arzaaa", eran remedados en las conversaciones de la calle.

Sarriá ha venido añorando duranto todos estos años a su compañero con el que intervinieron en el año 2001 en el programa El vagamundo, el formato de entrevistas de Jesús Quintero, donde hablaron entre otros temas de su actuación más complicado cuando vivían la popularidad teleivisiva tras aparecer en el concurso.

"Una sala con guasa", adelantaba Rosa sobre lo sufrido en Bilbao en aquellos años. Una discoteca que abría en las tardes de los fines de semana con clientes de todos los pueblos de alrededor, llevados en autobús, que se desfogaban en aquel local. Cuando ellos ya aparecían con su show por la noche, para seguir animando a la concurrencia, se encontraron con la sorpresa de que los parroquianos empezaron a arrojarles de todo por los chistes que ellos consideraban poco afortunados.

Entre esos gags que comenzaron a abuchearles estaba una mención a Felipe González. "Vamos a hablar de Felipe..", con el cabreo general. Sobre el presidente del Gobierno de entonces, y su acciones contra ETA, no querían saber nada. Propusieron un plante visto los ánimos, pero continuaron.

En otro sketch tuvieron que salir del escenario asediados por los proyectiles "Nos tiraban los vasos, los vasos de cristal", recordaba Sarriá. El enfado repetido era porque Rosa, El Pulga. él aparecía vestido de soldado. Era llamado por un superior, El Linterna, Sarriá, que interpretaba a un sargento. El recluta, con una escoba a modo de fuisl, aparecía con un pollo en la mano, como en la película Recluta con niño. Ante esa estampa castrense, sin hallar el atisbo de ironía y de antimilitarismo que tenía el gag, el personal volvió a cabrerarse con los cómicos malagueños. No querían bromas militares.

La pareja continuó como pudo, esquivando vasos, y el remate tenían los Sacapuntas era una copla de fandango con la que cambiaban su Málaga natal por el lugar donde estaban actuando. En lugar del "Málaga de mis entrañas, le duela a quien le duela, eres lo mejor de España", en aquella infausta aparición dijeron "Bilbao de mis entrañas, le duela a quien le duela, eres lo mejor de España". Esa despedida generó aún un mayor enfado del público rústico de aquella sala. "Bilbao no es España", se quejaban cabreados. "¿A quién se le ocurre?", les criticó el encargado del local. Como expresaron ante Quintero tuvieron que tomárselo con paciencia y marcharse cuanto antes. Encargos no les faltaban.

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