Cáncer de pulmón: así es uno de los tumores más agresivos y que ha causado la muerte a Julián Muñoz

El cáncer de pulmón es una enfermedad en la que las células del tejido pulmonar crecen de manera descontrolada y forman un tumor el cual va a ser más o menos grave dependiendo del tipo que sea. Si se trata de un cáncer de pulmón de células no pequeñas, suele ser uno de los más mortales ya que representa alrededor del 85% de los casos y tiene varios subtipos, como el adenocarcinoma, el carcinoma de células escamosas y el carcinoma de células grandes.

Luego está el cáncer de pulmón de células pequeñas que es menos común pero es mucho más agresivo para el paciente ya que, entre otras cosas, tiende a crecer y a extenderse rápidamente, por lo que la esperanza de vida es muy corta. Es por lo que lo convierte en uno de los tipos de cáncer más agresivos que hay porque no suele tener cura.

¿Tiene síntomas el cáncer de pulmón?

Para determinar la esperanza de vida, los profesionales se fijan en dos aspectos. En primer lugar, la etapa de la enfermedad en el momento del diagnóstico de la misma y la respuesta de cada paciente. Lo mismo sucede con el tratamiento que se vaya a emplear ya que lo primero es extirpar el tumor y a partir de ahí, habrá que evaluar la situación intentando siempre actuar con el mejor enfoque de tratamiento para el paciente.

El problema del cáncer de pulmón es que no da síntomas porque si los hubiera, se podría diagnosticar a tiempo y no que cuando los pacientes llegan a la consulta el tumor está en fase avanzada que es cuando aparece la tos, cansancio, bajada de peso unido al lugar donde tenga la metástasis.

Por ejemplo, si el tumor se le ha extendido hacia el hueso, el paciente tendrá dolor de huesos o si se ha extendido a la cabeza, empezará a tener comportamientos diferentes.

El cáncer de pulmón de diferentes fases

Es importante conocer las fases del cáncer de pulmón y en cuál de ellas estás para entender qué pasos son los siguientes que hay que dar. Pero recordemos que las etapas del cáncer son diferentes, dependiendo de si el tumor presenta células pequeñas o no pequeñas. Hablemos, en primer lugar, de este último ya que suele ser el más común entre los pacientes diagnosticados y se divide en cuatro etapas principales:

• Etapa 0

El cáncer está en su etapa más temprana y solo afecta a las capas más superficiales del pulmón. Las células anormales no se han extendido a otros tejidos, por lo que todavía es pequeño y tratable.

• Etapa I

El cáncer está limitado al pulmón y no se ha extendido a los ganglios linfáticos. El tumor mide menos de 4 centímetros. Se divide en IA (tumores más pequeños) y IB (tumores más grandes).

• Etapa II

El tumor es más grande o ha comenzado a extenderse a los ganglios linfáticos cercanos, pero aún está principalmente en el pulmón. Se divide en IIA (cáncer en el pulmón sin invadir ganglios linfáticos o con invasión limitada) y IIB (tumores más grandes o que invaden estructuras cercanas).

• Etapa III

El cáncer ha llegado a los ganglios linfáticos en el pecho o a estructuras cercanas como la pared torácica, el diafragma o el corazón. Se divide en IIIA (afecta ganglios linfáticos en el mismo lado del pulmón) y IIIB (se ha extendido a ganglios linfáticos más alejados o a órganos cercanos).

• Etapa IV

El cáncer se ha extendido a otros órganos fuera de los pulmones, como el cerebro, los huesos, el hígado o las glándulas suprarrenales. Es la etapa más avanzada y el tratamiento suele centrarse en aliviar los síntomas y prolongar la vida.

Cáncer de pulmón de células pequeñas

Este tipo de cáncer es más agresivo y se clasifica en dos fases principales. Una primera etapa considerada limitada ya que el cáncer está limitado a un solo lado del pecho y puede tratarse dentro de un campo de radiación. Generalmente, incluye el pulmón afectado y los ganglios linfáticos cercanos. El tratamiento es más eficaz en esta etapa, ya que el tumor está localizado.

Sin embargo, si nos encontramos en la etapa extensa, es decir, en la que el cáncer se ha diseminado fuera del pulmón afectado y puede haber llegado a otros pulmones, ganglios linfáticos distantes, o a otras partes del cuerpo como el hígado, los huesos o el cerebro. Es la etapa más avanzada del cáncer de pulmón y es más difícil de tratar.