La hora de Reina Mercedes

Emasesa parece que sigue con su plan de actualizar las tuberías de suministro de agua y el alcantarillado de las calles de Sevilla. Bien hecho, porque así conseguirá mejor servicio y menos fugas, con el consiguiente ahorro de agua. Y está bien, porque ya que nos piden a los ciudadanos que ahorremos en esta época de sequía, que parece duradera o para siempre, es lógico que lo primero sea mejorar la red. Y de camino, el alcantarillado. Lógico, porque se mejora la salubridad de toda la ciudad. Y ya que tienen que levantar las calles para renovar las redes, pues también se ocupan de actualizar los pavimentos de acerados y calzadas y el diseño de los mismos.

Esta semana han anunciado que a la finalización de las obras en la avenida de las Razas, por fin va ser la hora de los arreglos en la avenida de Reina Mercedes. Los vecinos de esos barrios, encabezados por la Asociación Parque Vivo del Guadaíra y otras entidades, en Heliópolis y los Bermejales, que abarcan hasta la avenida Reina Mercedes, llevan tiempo estudiando propuestas para que esa parte de Sevilla sea más amable para los peatones. Identificar cruces peligrosos, señalar rutas seguras para los centros escolares, parques y centros comerciales y deportivos, mejoras de los carriles bici, etc... Entre las ideas más significativas y por su trascendencia en toda la ciudad, está la de convertir la avenida Reina Mercedes y todo su campus universitario en un bulevar arbolado y principalmente peatonal. Las noticias recientes no aclaran si esa es la idea municipal aprovechando las obras de agua y alcantarillado. Pero deberían haberla tenido en cuenta.

La idea del bulevar de Reina Mercedes surge en la Escuela de Arquitectura y la Red Sevilla por el clima, con amplios apoyos técnicos y ciudadanos. Hace tiempo que los estudios y proyectos existen. Estaría bien dar publicidad a lo previsto porque tiene una lógica urbana incuestionable, como es dar un sentido global a una parte de la ciudad de características muy específicas: la acera de los impares totalmente residencial, de bloques que hacen una pantalla, y en la acera derecha edificios singulares de uso docente que se han construido a lo largo de los últimos cincuenta años, hasta componer un campus universitario por acumulación, que se apoya en los pisos y servicios que están en los bloques de la otra acera. No hay más que pasear por allí para verlo. Revisar todo ese espacio es una necesidad, con un diseño más coherente para la población y los usos actuales. Con más arbolado, mejor solución para los aparcamientos, mejores transportes públicos y zonas de estancia y paseo, a todo lo largo de la avenida, desde La Botella hasta la glorieta de Heliópolis. Todos los vecinos y los futuros arquitectos, ingenieros, biólogos, matemáticos y otros universitarios, que viven como casa propia la actual avenida, creo que estarán interesados, como otros muchos sevillanos, vecinos o no, en conocer cuanto antes mejor, cómo va a quedar Reina Mercedes.