Santana Motors arranca en Linares para proveer a las fuerzas armadas

El ayuntamiento de Linares (Jaén) ha mostrado su apoyo a la empresa Santana Motors S.L. en su proceso de implantación en el Parque Empresarial Santana. Lo ha hecho mediante la firma de un acuerdo de intenciones que llevará a que la nueva empresa pueda desarrollar productos destinados al sector de la automoción y defensa.

El concejal-delegado de Industria linense, Raúl Caro-Accino, ha anunciado que la compañía ya tiene registrada su sede social en la ciudad y está formada por “socios muy potentes y con conocimiento y experiencia en el sector de la automoción”. Uno de ellos, según ha indicado el edil, es el Grupo JPG. Esta empresa presenta un historial de 62 años de actividad, dispone de más de 100 trabajadores, ha llevado a cabo más de 900 proyectos y ha facturado más de 120 millones de euros en los últimos diez años. El Grupo de Ingeniería Reconstrucción y Recambios JPG S.A. está radicado en Linares. “Desde sus inicios ha estado volcada en dar servicio a las Fuerzas Armadas, centrándose fundamentalmente en tres áreas, como ingeniería, mantenimiento y suministro de recambios, siendo en la actualidad una de las principales empresas de defensa en su segmento y mostrando su empeño incansable para que Linares y Santana vuelvan a ser un referente en la fabricación de vehículos”, ha señalado Caro-Accino.

Este concejal también explicó que otro de los socios impulsores de Santana Motors S.L. es Eduardo Blanco, un piloto de vehículos todoterreno y uno de los patrones de Jatón Racing. Esta empresa con sede en Barcelona está, según su web comercial, "especializada en el desarrollo y fabricación de vehículos de Alto Rendimiento para uso cross country, raid y tácticos". Uno de estos últimos fue el Pastor ULTP un vehículo para operaciones especiales. Blanco también participa en el proyecto de la nueva Ebro y, en colaboración con Acciona, desarrollo el Acciona 100% Ecopowered que fue el primer coche de cero emisiones en participar en el Rally Dakar. A la puesta en marcha de este proyecto también se ha sumado Valentín Rouss, asimismo cofundador de Ebro.

“Desde este momento, el Ayuntamiento se pone a trabajar en acompañar y facilitar a esta empresa las instalaciones del Parque Empresarial Santana”. “Vamos a estar a su lado para que este proyecto tenga un largo recorrido y, en definitiva, se pueda fabricar aquí toda la cartera de productos que tienen”, ha afirmado Raúl Caro-Accino, quien ha valorado que Linares cuenta con una serie de “ventajas competitivas” que posibilitan esta implantación.

Este apoyo por parte del ayuntamiento de Linares es clave para esta nueva compañía dado que el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía aprobó en 2021 delegar en el consistorio la gestión de las 22 naves industriales con las que cuenta el Parque Empresarial Santana y del complejo residencial denominado ‘La Colonia de la Ermita’, ubicado en el municipio y que cuenta con 20 viviendas, tras el fin de la actividad de Santana Motor en 2011. La Junta también ha impulsado el Plan de Reacción Inmediata que incluye el Proyecto de Intervención el Parque Empresarial Santana para mejorar y acondicionar las instalaciones, para lo que la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA) invertirá 6,4 millones de euros.

En Linares se situó la actividad fabril de Santana Motor desde 1956, originalmente Metalúrgica de Santa Ana, quien fabricó bajo licencia de Land Rover estos productos. En 1985 se inició su colaboración con Suzuki de cara a ensamblar modelos de esta marca como los Samurái, Vitara y Jimny. En 1995 la Junta compró la empresa a Suzuki y en 2023 se produjo el desarrollo del Santana Aníbal, basado en los antiguos Land Rover y utilizado por distintos ejércitos, entre ellos el español. Un modelo basado en un Suzuki, el Vitara, saldría de Linares en 2005, aunque el último producido fue el Jimny, con el que se dio fin a la relación con la empresa japonesa, si bien Santana seguiría produciéndolo tras la cesión de su fabricación.

En 2006, no obstante, ya se había puesto en marcha un proyecto conjunto con Iveco que daría a luz al Massif, un todoterreno al que seguiría el Campagnola, y que abría las puertas a la adquisición por la empresa italiana de Santana, algo que finalmente no ocurrió. En 2009 la Junta, a través de IDEA, asumió el control de Santana Motor para, dos años después, producirse la disolución de la compañía.