"Jaén ni poyas, con permiso, buenas tardes" de Cristian Ventura llega a la capital jiennense con boletos de lotería

Jaén/"Con permiso, buenas tardes", es una frase que desata una carcajada inmediata en la mayoría de quienes lo escuchan. Una frase que se ha vuelto viral de la mano de Cristian Ventura, un joven sevillano que se monta en helicóptero, caballo o viaja hasta Gibraltar para servir un copazo con elegancia y su particular forma de hacerlo. Traje, camisa, semblante serio, largos paseos, "con permiso buenas tardes", la bandeja siempre en la mano con una gran estabilidad, un vistazo a la botella y el dedo meñique siempre alzado para echar la bebida a la copa.

Sus vídeos acumulan millones de visitas en tik tok y en instagram, el más viral de esta última red social alcanza casi los 11 millones de reproducciones, una fama que le ha llevado a hacer importantes colaboraciones y aparecer con actores o deportistas. Algo que tampoco suele fallar, es la canción de 'Un Beso y Una Flor' de Nino Bravo o 'Quijote' de Julio Iglesias, de fondo en sus vídeos.

Con esta última ha llegado a Jaén para entregar ni más ni menos que boletos de lotería de Navidad, como no, una copa de champán y dejando frases típicas jaeneras. Como suele acostumbrar sus rutas con la bandeja en mano recorren los lugares menos inesperados, y en la capital del Santo Reino ha empezado con un "Jaén ni poyas, buenas tardes", en la glorieta Oliva, siguiendo con un "lagartos, con permiso buenas tardes" por la plaza Santa María frente a la Catedral, llegar hasta la calle Bernabé Soriano donde sirvió una copa, subir hasta el castillo de Santa Catalina, pasearse por la feria de San Lucas entre la Policía con un "meñiques, con permiso, buenas tardes".

El culmen de la ruta de Ventura terminó en la administración de Loterías y Apuestas del Estado número 15 de Jaén, "La Niña Bonita" donde entregó el premio mayor ganado en hispaloto del euromillones. Allí sirvió su última copa de champán y se despidió con la elegancia característica.

Comenzó a trabajar con 14 años

Detrás de la figura viral de Cristian Ventura, el propio ha confesado en varias entrevistas que no es un personaje. Comenzó a trabajar en el bar de su abuelo con 14 años mientras estudiaba. "Nunca he querido nada de nadie, ni quería pedirle dinero a mis padres. Así que me metí desde muy pequeñito, mientras lo compaginaba con los estudios, y descubrí que era un trabajo que me encantaba", expresaba para El Español.

El joven de 27 años, cursó la ESO y después realizó un grado de soldadura y calderería, sin embargo, se empezó a buscar la vida en Sevilla de camarero, contando que trabajaba 10 horas al día por 400 euros al mes, hasta que fue encontrando opciones mejores. Ventura saltó a la fama después de que un compañero suyo le insistiera en grabarle y subirlo a redes sociales mientras servía una copa. Le costó convencerlo, pero al final lo hizo y sus vídeos ya no pasan desapercibidos para nadie.

Ese primer vídeo viral fue en Palma de Mallorca donde también hizo un curso de barista y de barman, hasta que cada vez consiguió más alcance, hasta colaborar con grandes firmas, lo que le ha permitido dedicarse exclusivamente con las redes sociales. Quien le diría a ese niño de 14 años que por servir una copa le podrían pagar grandes cantidades de dinero.