Usuarios del Hospital 'Princesa' de Jaén denuncian tener que atravesar un lozadal para aparcar: "Es una imagen tercermundista"
Salud
"Es una imagen tercermundista", denuncia una de las persona cuyo coche quedó encallado en el barro
Los secretos que esconde el aceite temprano paso a paso: sacrificio y esmerado cuidado
Jaén/Personas mayores con barro hasta mediada la pantorrilla y grúas entrando para sacar coches atascados. Son imágenes que se han acostumbrado a presenciar los trabajadores del Hospital Neurotraumatológico de Jaén, conocido coloquialmente como el ‘Princesa’, cada vez que llueve. Tras un fin de semana de precipitaciones este lunes las escenas se han repetido y apuntan a que serán la tónica esta semana en la que la lluvia va a estar muy presente sobre la capital del Santo Reino.
El problema lo provoca la falta de aparcamiento en las instalaciones del complejo hospitalario, lo que lleva a muchos usuarios a tener que aparcar en un terreno posterior, cercano al helipuerto, que según la Delegación de Salud pertenece a la Diputación Provincial de Jaén y a un particular. Se trata de zona de tierra, con baches como colinas y que curiosamente presenta unos bolardos de cemento que ayudan a los coches a saber por dónde entrar y salir.
Su uso es diario pero los días de lluvia se convierte en un lodazal que es una auténtica trampa para los coches y sus ocupantes. Es lo que cuenta uno de los usuarios afectados que prefiere no dar su nombre a conoce. “La imagen que he encontrado ha sido tercermundista. Había gente mayor con barro por las rodillas. No entiendo como un hospital provincial puede dar una imagen como esta”, denuncia.
Él, con ayuda, pudo sacar su coche del fango no después de pocos intentos pero personal de mantenimiento del hospital asegura a Jaén Hoy que es habitual que, en los días de más lluvia, las grúas tengan que acceder al recinto para rescatar a los vehículos que quedan encallados. Alegan desde la Junta que ese no es problema suyo ya que el parking habilitado (a todas luces escaso y desbordado) está completamente asfaltado.
Se resignan los empleados del Hospital Neurotraumatológico que ya dan por sentado que tendrán que volver a poner cartones en las escaleras y los accesos para evitar que “todo se llene de barro”, pues son bastante pesimistas ante la posibilidad de que pueda dársele una solución a un problema que “viene de lejos”.
También te puede interesar