Las últimas lluvias sólo hacen crecer los embalses de Jaén un tres por ciento

La borrasca 'Karlotta' dejó a su paso por Jaén unos días de intensas precipitaciones en toda la provincia. Unas ansiadas lluvias después de un invierno marcado por la escasez de agua, llegando a tener que producirse en algunos municipios como Martos, cortes de agua antes de Noche Vieja. Así, los pantanos jiennenses partieron el pasado año de un cinco por ciento del agua que tenía acumulada y el 2023 cerró con 479,194 hectómetros cúbicos de agua almacenada en los embalses de la provincia, cuando el 2022 terminó con 602,35.

Las abundantes lluvias, dieron un respiro a los jiennenses que abrieron sus paraguas con gusto. Sin embargo, los días de aliento fueron pocos y de nuevo se han divisado cielos despejados acompañados de temperaturas nada invernales, alcanzando el mercurio los 20 grados, una situación que no ayuda a paliar la sequía. Tan insuficientes han sido las precipitaciones que los embalses sólo han crecido de su capacidad algo más de un tres por ciento.

Teniendo en cuenta que la capacidad total de los pantanos de Jaén es de 2.361,354 hm³, el 2024 inició con los embalses al 21,05 por ciento de su capacidad, y la subida como consecuencia del agua caída en los últimos días ha dejado los embalses al 24,10 por ciento, según los datos actualizados hasta ayer 14 de febrero de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.

Incremento de agua de los embalses de Jaén

Las recientes las precipitaciones no solucionan la sequía que sufre España, y aquellos embalses que cuenta con una capacidad superior a los 100 hm³, sólo uno de ellos supera el 30 por ciento de agua albergada, se trata de La Fernandina, que puede almacenar 247,138 hm³ y a 14 de febrero se encuentra al 31,01 por ciento. El que presenta un aspecto más seco de estos es el de Guadalmena, que contiene un 17,79 por ciento del agua y es capaz de albergar (344,795 hm³).

El Tranco se encuentra al 28,12 por ciento de su capacidad, por lo que ha subido algo más de tres puntos, con 142,194 hm³, más del doble de los 61,339 hm³ que alberga el Guadalmena, lleno al 17,79 por ciento, sólo ha subido un punto desde enero. Tampoco llega al 20 por ciento el Giribaile con un volumen de 89,026 hm³ y una capacidad 491,143 hm³, se encuentra al 18,13 por ciento de su capacidad. En enero estaba al 16,38 por ciento. Por otra parte, el embalse de Guadalén tiene un volumen actual de 33,561 hm³, es decir, está al 20,65 de su capacidad, por lo que ha aumentado cuatro puntos con respecto al pasado mes. Un poco por encima, se encuentra el de Jándula, que está al 24,47 por ciento de su máximo, casi cuatro puntos más también que en enero.

El Rumblar con 33,26 hm³ de agua almacenada se encuentra al 23,74 por ciento de capacidad, por lo que ha experimentado un mayor incremento desde enero comparado con otros embalse, cuando se encontraba en un 16,44 por ciento. Cabe recordar que los suministros de los municipios dependientes de este pantano estaban hasta hace un mes en alerta ante la escasez de agua que podría derivar en cortes.

Temperaturas altas récord

A las escasez de lluvias se suman las altas temperaturas, que no ayudan a que remita la sequía ya que el agua se evapora más rápido. Según el informe de la AEOPAS, Jaén registró temperaturas de cálidas a muy cálidas en 2023, con una media mensual de 18,1 °C. En estos días de invierno se han alcanzado temperaturas insólitas llegando el mercurio a superar los 20 grados en muchos municipios de la provincia como Linares, Úbeda o Jaén. De hecho, ayer 14 de febrero en la capital jiennense se llegó a los 21 grados centígrados.