La 'maravilla' natural jiennense que está entre las 9 de Andalucía, según National Geographic

El patrimonio natural de la comunidad andaluza es tan rico que señalar tan solo uno de sus muchos rincones resulta harto complicado. La revista National Geographic, no obstante, elabora una lista con nueve maravillas naturales repartidas por la geografía de sus ocho provincias. Como no podía ser de otro modo, el territorio jiennense aporta el parque natural más grande de España y segundo mayor espacio protegido de Europa. En plena sierra de Cazorla, Segura y Las Villas, este enclave paisajístico reúne una flora y fauna espectaculares y dignas de admiración.

Se trata, además, de un lugar de eminente interés turístico para nuestra provincia en los últimos años por la belleza de sus paisajes y la limpieza de su cielo, que convierten este espacio en una zona 'starlight', es decir, ideal para la contemplación de las estrellas y otros fenómenos. La extensión de este parque es tal que abarca más de una veintena de municipios, por lo que el grado de protección de su entorno puede variar ligeramente en función de la zona donde nos encontremos.

Entre sus múltiples tesoros naturales destacan el río Borosa o la Cueva del Agua de Tíscar, en Quesada. La densidad de sus bosques unida al clima provoca que estas sierras al nordeste de la provincia alberguen una de las floras más ricas de toda la cuenca mediterránea, con más de 1.300 especies catalogadas. Como señalan desde la revista internacional, Andalucía es una de las regiones más ricas desde el punto de vista cultural y geográfico, pues "reúne dentro de sus límites fronterizos un conjunto de paisajes y ecosistemas de lo más diverso". A continuación, repasamos las otras ocho maravillas naturales de nuestra comunidad.

Parque Nacional de Doñana

Es uno de los espacios naturales protegidos más importantes de Europa por su flora y fauna, además de uno de los más conocidos en nuestro país. "Esta encrucijada clave para las rutas migratorias de aves entre dos continentes supone, además, el último refugio para algunas especies en peligro de extinción", como es el caso del lince ibérico. Este parque ubicado en la provincia de Huelva está formado por dos ecosistemas principalmente: por un lado, los pinares y matorrales propios del clima mediterráneo, y por otro, la marisma.

Declarado Patrimonio de la Humanidad, cabe señalar que su espacio también abarca parte de las provincias vecinas de Cádiz y Sevilla. Uno de los mayores visionarios para otorgar el reconocimiento de este rincón de Andalucía en los años 60 fue el científico José Antonio Valverde. En la actualiad, "Doñana es el espacio natural con mayor biodiversidad de Europa", pues cerca de 37 mamíferos conviven con un amplio catálogo de aves y otras especies animales.

Parque Nacional de la Sierra de las Nieves

Se encuentra en la zona más alta de la Serranía de Ronda, en la provincia de Málaga, donde la nieve se hace habitual entre sus cumbres. la Andalucía occidental. "Su peculiar geología está marcada por el contraste entre los paisajes kársticos y los afloramientos de peridotitas, que se suman a la presencia de un abeto único y que se encuentra en pocos lugares más, como la Sierra de Grazalema en Cádiz, para formar un conjunto natural digno de admirar".

Destaca asimismo su rico patrimonio cultural e histórico, visible en la notable presencia de alquerías, castillos, torres y fortalezas diseminadas por las 23.000 hectáreas del parque, entre las que se incluyen algunos municipios como Benahavís, Ronda o Tolox. "Su gran diversidad biológica se traduce en más de 1.400 especies de plantas, 15 de ellas amenazadas, además de casi 200 especies de vertebrados, entre los que se encuentran uno de sus animales más emblemáticos: la cabra montés".

Parque Natural y Nacional de Sierra Nevada

Está realmente cerca de los jiennenses, aunque abarca parte de las provincias de Granada y Almería a través de sus 85.883 hectáreas. Fue reconocido como parque nacional en 1999 gracias a su paisaje representativo de los sistemas mediterráneos de montaña y alta montaña, además del patrimonio cultural e histórico que dejaron las diferentes culturas: tartesos, romanos y visigodos. También aquí se encuentran los picos más altos de la península ibérica: el Mulhacén (3.482 m) y el Veleta (3.392 m).

"Desde pastizales de montaña hasta bosques caducifolios y matorrales mediterráneos, su diversidad biológica es notable, ya que presenta una de las floras más valiosas de Europa, con más de 2.000 plantas catalogadas, más de un 25% de las que existen en la península". En su interior se reparte toda una red de itinerarios, como el de las acequias del Poqueira, el Camino de los neveros o el del Dornajo-Campos de Otero, entre otros.

Paraje Natural del Torcal de Antequera

Se encuentra en el centro de la provincia malagueña y es uno de los mejores ejemplos de relieve cárstico de Europa. Las torcas, que son sus formas más comunes, dan nombre a este espacio singular repleto de pequeñas depresiones circulares de fondo plano y colores rojizos. "Su paisaje, único en el mundo, motivó su declaración como Sitio de Interés Nacional en 1929, y sus cuevas, desfiladeros y simas también han servido de escenario para numerosas películas". Se trata, de hecho, de una zona con Especial Protección para las Aves y hogar de numerosos reptiles y mamíferos, así como un interesante observatorio astronómico.

Parque Natural del Cabo de Gata-Níjar

Fue el primer espacio marítimo-terrestre protegido de Andalucía, reconocido como Reserva de la Biosfera y Geoparque Mundial por la UNESCO. Este parque almeriense es todo un ejemplo de contraste entre el medio marino, el litoral y el terrestre, con numerosas especies exclusivas que conviven en uno de los ecosistemas más áridos del continente. "La ausencia de un invierno climático y su diversidad geológica son particularidades que pueblan sus 50 km de costa acantilada, la mejor conservada del litoral mediterráneo europeo". Su paisaje está marcado por el predominio de sustratos de naturaleza volcánica, arenales naturales como Mónsul, calas inaccesibles, arrecifes y fondos marinos repletos de posidonia.

Desierto de Gorafe (Granada)

Más conocido entre los vecinos del municipio como 'Los Coloraos'. Esta zona es principalmente conocida por sus yacimientos arqueológicos, donde se encuentran hasta 81 megalitos, algunas casas cueva aún habitadas y el paisaje desértico. "La georuta Desierto de Gorafe muestra cómo el desmantelado de las rosalinas y el carácter oxidante de los sedimentos han creado un paisaje de tales colores". La erosión a lo largo del tiempo ha dado lugar a formas de lo más interesantes, como la Rambla de los Anchurones, "que vertebra el fondo del barranco de su mismo nombre, por donde admirar el cañón y las paredes que lo envuelven".

Geoda de Pulpí (Almería)

Fue descubierta en diciembre de 1999 por los miembros del Grupo Mineralogista de Madrid en la Mina Rica de este municipio almeriense. Debido a su transparencia y su estado de conservación, esta geoda de ocho metros de longitud y dos de altura tapizada con enormes cristales de yeso es una maravilla natural de referencia, la más grande de estas características en el mundo. "Ubicada en la Sierra de Aguilón, objeto de explotación minera a lo largo de la historia, la geoda se creó en dos fases, la de formación del hueco y la del depósito mineral en su interior".

Minas de Riotinto (Huelva)

Toda una retahíla de culturas a lo largo de los siglos han explotado desde hace cinco mil años el hierro, la plata y el cobre de este enclave onubense, alrededor del cual se formó el pueblo de Minas del Riotinto. "El río Tinto es considerado hoy en día como el más ácido del mundo, y es que sus tonalidades, que van del púrpura al ocre, atestiguan la cantidad de minerales y azufre que lo tiñen".

Hasta cinco visitas diferentes pueden realizarse hoy en día a través de su paisaje y sus túneles de origen minero, con galerías de 200 metros. "También es reseñable subirse al Ferrocarril Minero para recorrer los paisajes mineros o entrar a la Mina de Corta Atalaya".