Turistas franceses y nacionales se dan cita estos días en Andújar con motivo de la romería

La romería de la Virgen de la Cabeza es un atractivo no solo para la religiosidad popular, sino también para el turismo. El interés de los propios ciudadanos iliturgitanos queda reflejado estos días en las continuas visitas a la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Andújar. “Mucha gente del municipio acude en busca de carteles e información sobre la programación y el horario de las fiestas”, apunta Luisa Alcaide, técnica responsable de este departamento. Una de las principales cuestiones para los romeros, por ejemplo, es conocer el control del tráfico para la subida y bajada hasta el cerro por la carretera.

No obstante, la globalización de esta multitudinaria romería ha provocado que el foco de su celebración se expanda más allá de nuestras fronteras. “El turista extranjero pregunta por la ciudad, así como por el parque natural de Sierra Morena”. El entorno del santuario constituye por ello un aliciente para aquellos devotos que quieren sumarse a las distintas actividades. “Viene mucho turista francés, algo más enfocado en el turismo religioso”, puntualiza Alcaide.

A pesar de que hasta la finalización de la romería no se valoran los datos de ocupación hotelera, esta técnica de turismo sí señala un crecimiento exponencial de las visitas presenciales y virtuales a su oficina en las vísperas del fin de semana. “Llegan muchos devotos desde Barcelona, quienes generalmente emigraron en su día y vuelven para estas fiestas”. En esto juegan un importante papel las distintas cofradías y hermandades filiales que peregrinan hasta la sierra con sus respectivas comitivas. “La gente de Madrid, por ejemplo, suelen ser visitantes más esporádicos con motivo de la romería”.

Sin embargo, los hoteles y el atractivo cultural no son la única baza para estos turistas llegados desde diferentes partes. “Hay casos en los que simplemente vienen con su caravana para acampar en el parque natural”. La baraja de opciones es, sin duda, una muestra más de la riqueza de esta fiesta tan emblemática para los romeros de Andújar, que una vez al año se convierten en el punto de mira del turismo internacional.