La Policía Nacional desmantela dos narcopisos en Jaén: la operación Rambla se salda con dos detenidos y un fugitivo

Habían convertido la vida de sus vecinos en un infierno con constantes robos, daños en los bloques de viviendas, insalubridad y un ruidoso trasiego de personas durante la madrugada. Los culpables eran una banda criminal que regentaba dos narcopisos en el Polígono del Valle de Jaén hasta que agentes del Grupo de Estupefacientes de la Policía Nacional de Jaén los ha desarticulado. Todo en el marco de la operación 'Rambla' que se ha saldado con la detención de una mujer de 43 años de edad y un varón de 52, ambos con una variedad de antecedentes a sus espaldas de todo tipo.

Ambos hacían las funciones de guarda, custodia y venta de la sustancia estupefaciente en las dos viviendas, mientras que el 'cabecilla' de la organización, un hombre de 32 años de edad, era el que llevaba el control de unos pisos en los que había instalado videocámaras, micrófonos y altavoces para asegurarse de que los detenidos realizaban bien su trabajo.

Todo acabó con la entrada y registro de los dos narcopisos por parte de unos agentes que se encontraron con dobles puertas a la entrada, dificultando así el acceso a los mismos y con marcos reforzados con ferralla empotrada en las paredes. Una vez dentro, se intervinieron un total 70 gramos de droga, dividida en cocaína, heroína, hachís y varios comprimidos de tranxilium, cantidad que, una vez mezcladas y añadiendo sustancias de corte para aumentar el rendimiento, podrían llegar a triplicar el valor de venta. Los detenidos fueron puestos a disposición de la autoridad judicial competente.

La investigación

Los agentes han obtenido estos resultados tras continuas vigilancias y seguimientos a determinadas personas que son conocidas, dada su historial delictivo, por poder estar regentando dos viviendas que estarían sirviendo de narcopisos. Así se inicia un "arduo camino en aras a confirmar verdaderamente el uso de las viviendas", según apuntan desde el Cuerpo.

Durante la fase de investigación, los agentes confirmaron que se trataba de un grupo de tres personas, siendo el cabecilla el responsable de las dos viviendas y teniendo bajo su cargo a los dos detenidos, quienes estarían controlando los dos narcopisos, funcionando ambos como punto de venta de sustancias estupefacientes y de consumo además de uno de ellos, también se estaría utilizando para custodiar pequeñas cantidades de diferentes tipos de droga.

Los agentes confirmaron las fuertes vigilancias que tomaba el cabecilla para el control de la venta de la sustancia estupefaciente, para lo cual había instalado videocámaras y altavoces en las viviendas. Una vez confirmada la actividad que se estaba llevando a cabo en las viviendas, los agentes llevaron a cabo la explotación de la operación con la entrada y registro de ambos narcopisos, encontrándose a la entrada con férreas medidas de seguridad a la hora de acceder a las mismas, pues los pisos tenían doble puerta antiokupa a la entrada y los marcos estaban reforzados con ferralla empotrada en las paredes.

Una vez en el interior y ejecutado el registro, los agentes detuvieron a la pareja que regentaba las viviendas, quedando pendiente de detener al 'cabecilla' del grupo, interviniendo 46 gramos de cocaína, 22 de heroína y 10 gramos de hachís, así como 25 comprimidos de tranxilium, reseñando que esta cantidad de sustancia estupefaciente en el mercado ilícito sin ningún tipo de corte superaría los 4000 euros, triplicando este valor una vez mezclada y añadiendo sustancia de corte para aumentar el rendimiento.