Así fue la noche de la Tragantía en Cazorla: magia a raudales y más de cuatro horas de espectáculo

Hay quien no verá la luz del día ni la noche de San Juan, al menos eso dice la leyenda. La Tragantía permanece en su cámara secreta entonando su lastimera canción cada solsticio de verano en Cazorla en una cita que reúne a nuevos curiosos cada año. El atractivo turístico del que ya presume esta localidad enclavada junto al parque natural aúna el misterio y la leyenda como un tesoro más de su valioso patrimonio cultural. Las vísperas de la festividad de San Juan son más mágicas aún entre las calles cazorleñas gracias a esta renovada cita que trabaja por mejorar su organización en los últimos años. Esta última edición, con las temperaturas más elevadas de la cuenta y un cielo estrellado, cumplía con las expectativas de novatos y veteranos.

La tarde y noche del sábado traía el recuerdo de la mujer serpiente que habita el castillo de La Yedra con todo un repertorio de actuaciones y espectáculos con los que plantear una auténtica jornada de entretenimiento. Con más de cuatro horas de actividades prácticamente sincronizadas, los cazorleños y visitantes de fuera pudieron disfrutar de un magnífico recorrido desde la imponente fortaleza que corona el municipio, al Solar, San Antón, la Tejera e incluso las ruinas del templo de Santa María. Desde danzas y bailes a interpretaciones musicales se sucedieron en una noche de espectacular belleza en la que no faltaron tampoco la luz y el color. Varias compañías teatrales pusieron de su parte para amenizar el programa organizado por la concejalía de Cultura en colaboración con otras instituciones provinciales.

Uno de los momentos más destacados se vivió con la impresionante puesta en escena de LosDedae Dance Company, una reputada compañía de danza contemporánea llegada desde Alcalá de Henares. Sus componentes ofrecieron a los espectadores una singular demostración que se acabó extendiendo hasta las dos de la madrugada ante la presencia de más de un centenar de personas. Los más entregados a la nocturnidad aguantaron hasta el final, con la torre del homenaje de La Yedra como testigo fiel de cada uno de los actos. De igual manera, colgados desde sus pétreos muros pudieron admirarse a auténticos equilibristas capaces de desafiar la lógica humana.

El propio Ayuntamiento de Cazorla compartía este domingo en sus redes sociales un vídeo recopilatorio con algunas de las imágenes más impactantes de la jornada. Se cumplía así otra víspera de San Juan marcada por la respuesta del público asistente, cada vez mayor, y un programa de actividades inmejorable con el que rendir cuentas una vez más a la temible amenaza de la Tragantía. Será justo ahora, con el verano recién inaugurado, cuando esta pequeña localidad de la sierra comience a recibir a los primeros turistas rurales dispuestos a enfrentar el calor de estos próximos meses.