La estación de autobuses de Jaén no se arreglará hasta que no se ejecute el “gran proyecto” del centro de ocio

Decenas de autobuses suben y bajan por la avenida de Madrid de Jaén cada día, el trasiego de pasajeros que paran, descansan, llegan a la ciudad o se van desde la estación de autobuses es continuo. Un edificio, que aunque algunos de los que parten o se bajan desconocen, se trata de un inmueble protegido por la Junta de Andalucía como Bien de Interés Cultural, un hito del racionalismo en la ciudad y de una antigüedad de 75 años que albergó el Hotel Rey Fernando.

Por las puertas del vestíbulo donde se sientan los pasajeros a esperar su destino o donde las pantallas marcan las horas de salida y llegada de los autobuses que recorren ciudades y pueblos han pasado décadas de desencuentros políticos, decadencia del edificio que lo alberga, prácticamente abandonado, pero también años de prosperidad y un ambiente de ininterrumpido movimiento desde las habitaciones del hotel que servía de estancia para los viajeros que paraban en la capital y lugar de celebraciones de eventos antaño. 

Una imagen que difiere del estado actual donde los grafitis de colores adornan ahora su fachada amarilla de origen modernista, desconchada en muchas zonas dejando a la vista el cemento, con ventanas rotas, carteles superpuestos y con restos del color verde pino desgastado de los ventanales que tuvo hace años. Sin un lugar donde sentarte a tomar un café para hacer más amena la espera o saciar el hambre después de un viaje largo. 

Sin arreglo hasta el "gran proyecto"

Todo un edificio de tres plantas que está vacío a excepción de una obligada estación y los andenes. Así, desde el año 2006 con la clausura del hotel, que aún parece no haber plazos seguros de que vuelva a ser un espacio donde pernoctar, así como del arreglo de su fachada e interior de la que los vecinos exigen el cuidado. 

El arreglo completo de esta infraestructura (incluido pintura y demás desperfectos) se ejecutará conjuntamente con el “gran proyecto” según indica el concejal de Conservación e Infraestructuras Municipales, Cementerios, Medio Ambiente y Seguridad Ciudadana, Antonio Losa, a este medio. Este “gran” plan consiste en convertir la estación de autobuses (con el traslado de los servicios de transporte a la estación de Renfe) en un espacio de ocio cultural.

Fue una de las promesas del PP y una de las reivindicaciones de Jaén Merece Más. Habilitar espacios para actividades deportivas y culturales que “demanda la ciudadanía en general y la juventud en particular”. Sin embargo, por ahora no hay fecha de anuncio para convertir Renfe en una estación intermodal con el traslado de los servicios de autobuses allí y convertir el edificio BIC en un lugar para el ocio. Sobre la cafetería, que lleva cerrada cuatro años, se está estudiando si es viable licitarla de manera individual, tal y como señala Losa.

¿Dará tiempo en este mandato?

Tampoco aclaran si en este mandato dará tiempo a ejecutar el “gran proyecto”, pues están “trabajando en ello” apunta el concejal de Conservación e Infraestructuras. Otro de los propósitos es devolverle la vida pasada al Hotel Rey Fernando. Un proyecto que se quedó con la miel en los labios, pero con un sabor agridulce por parte del grupo empresarial Hotel Condestable Iranzo SA en el anterior mandado, quienes iban a ocupar el antiguo hotel.

Una cesión para su rehabilitación como hotel de tres estrellas con 70 habitaciones (60 dobles y 10 individuales) y que diera trabajo a unas 18 personas, con el objetivo de que volviera a funcionar como hotel a comienzos de 2025. Un proyecto más para Jaén a medio hacer y que ha ido a parar a un cajón con candado y sin llave.

En un pleno celebrado en abril de este año, la concejal de Cultura de Jaén Merece Más, María Espejo aseguró que “una vez que este equipo de Gobierno llegó al Ayuntamiento se le pidió al empresario el proyecto y este nunca apareció”. Además, el PP siempre ha requerido que el hotel sea de cuatro estrellas y no de tres como se planteó.

"Un lugar siniestro"

Con todos estos objetivos, sin fecha concreta, la estación de autobuses BIC deja a la vista un estado dejado por décadas del que los propios comerciantes, jiennenses y vecinos se han quejado. Ya en 1999 el Defensor del Pueblo Andaluz se pronunció al respecto en un informe especial que analizaba las estaciones andaluzas y aconsejó que la de Jaén mejorara su higiene y limpieza y renovara sus instalaciones. En 2009 se realizó una rehabilitación por parte de la Junta de Andalucía, pero las quejas de la oposición del PP no tardaron en llegar por goteras y humedades.

Al aspecto desarreglado se suma puntualmente la inseguridad. "El concejal de Mantenimiento ha adecentado con mucho gusto la Plaza de la Libertad, pero el edificio es un lugar siniestro que concurre ambientes complicados a ciertas horas, por lo que es necesario dar salida a esa gran superficie en el centro de Jaén", expresa Francisco Marín, presidente de la Asociación de empresarios del centro.

Jaén fue la segunda capital andaluza, tras Sevilla, en tener una estación de autobuses. Esta fue diseñada por los arquitectos Sánchez Ballesta y de la Peña en 1941 e inaugurada en el 45. Este complejo responde, desde el proyecto inicial, a una vocación claramente racionalista como lo atestiguan las diversas propuestas que se suceden entre los años 1940 y 1945. 

La nueva arquitectura para el transporte permitió formalizar con un nuevo lenguaje las ideas del Movimiento Moderno extendidas por Europa tal y como describió la Junta en su Catalogación de BIC. El Hotel se levanta sobre la gran sala de espera y vestíbulo principal de la Estación. La resolución de su remate en forma curva, limpia de ornamento, es de una incontestable potencia formal muy característica de los planteamientos arquitectónicos del racionalismo. 

“Del resto del conjunto destaca el magnífico vestíbulo porticado cuya osada estructura se prolonga hacia los andenes como una imponente marquesina volada. Ni siquiera las concesiones a un cierto lenguaje vernáculo historicista de la torre del reloj, empañan la indudable propuesta moderna del conjunto”, se señala en la descripción.

Por ello, los vecinos del barrio de Jaén y específicamente del Belén llevan años reclamando la mejora del edificio. "La estación de autobuses debería estar en condicones da miedo ir. Mientras que piensan que van a hacer con la estación intermodal debería tener un buen mantenimiento de limpieza, de papeleras y ventanas rotas", señala la presidenta del Movimiento Vecinal de Jaén, Pepi Alcántara. Además, añade que deberían aclarar que pasará con el Hotel Rey Fernando ya que debido a su estado de abandono es un "nido de ratas". "Se han oído muchas cosas, pero no toman acción, si el hotel se rehabilitara ahí tendríamos una baza para exigir que esté en condiciones", destaca Alcántara.

“Hay mucha suciedad y la imagen que da en la ciudad no es muy buena, el aspecto de las paredes está descuidado, hay pintura por todos lados. A ciertas horas da un poco de miedo pasar por allí”, expresa la presidenta de la Asociación de Vecinos del Guadalquivir, Mari Carmen Navas.

El controvertido traslado del servicio de autobuses

Sobre el traslado de los servicios de autobús a una supuesta futura intermodal en Renfe hay opiniones divididas. “Entendemos que si el sistema de transporte público se centraliza, ponen en marcha el tranvía y facilitan el acceso liberando el tráfico y haciendo atractiva la zona, será un beneficio para el jiennense y como consecuencia para el comercio del centro. No solo nos beneficiaría, es de “obligada responsabilidad” dotar al centro de una gran zona de ocio, hotel, parking…”, expresa el presidente de la Asociación de Empresarios del Centro. 

Sin embargo, algunos vecinos de Belén no piensan igual, puesto que al situarse la estación en una zona céntrica facilita a los vecinos su acceso, especialmente a las personas más mayores. “Además, da más vida al barrio, los viajeros se paran en los bares y tiendas”, cuenta Navas.

La propuesta de Jaén Merece Más contempla la ubicación de la estación intermodal en la actual estación de Renfe, aprovechando y rediseñando sus instalaciones para integrar tanto trenes como autobuses. Mediante el soterramiento de las vías del tren, se eliminaría la barrera física que divide la ciudad y se crearía un bulevar peatonal arbolado desde la plaza Jaén por la Paz hasta el polideportivo de las Fuentezuelas. Asimismo, los autobuses estarían situados en superficie, junto a un amplio aparcamiento público y conectados con paradas de tranvía, taxis, autobuses urbanos y un carril bici, en pleno casco urbano.

18 años de intentos

A este traslado le sucedería la deseada reconversión de la estación de autobuses tras más de 18 años de intentos. En el año 2003 el que fue concejal de Urbanismo, Manuel Peragón (PP), presentó un proyecto en el que se demolería el hotel para convertirlo en uno de cuatro o cinco estrellas con zona infantil, y un parking soterrado en la actual plaza de La Libertad. Esto fue denegado por el carácter del edificio de Bien de Interés Cultural.

Dos años más tarde, finalmente el Ayuntamiento y Junta de Andalucía consiguieron un acuerdo. Se adaptó el proyecto inicial y se propuso conservar la estructura del edificio sin tener que demolerlo, con la condición de rehabilitar el edificio. Por lo demás, se mantendría las infraestructuras previstas, como un aparcamiento bajo la plaza de La Libertad.

Ese mismo año, la empresa contratada Olivencia SL derribó la fuente ornamental que llevaba más de medio siglo en mitad de la plaza, pero todo se paralizó de nuevo en 2005 cuando la Junta presentó un recurso contencioso-administrativo contra toda la operación urbanística por entender que no cumplía la legalidad. Las obras se suspendieron y en 2007 entró el PSOE e IU en el Ayuntamiento anunciando que el parking no se haría atendiendo así a las peticiones de vecinos.

En noviembre de 2009 se trabajó en la reforma con un coste de 1,4 millones de euros financiados por la Junta de Andalucía. En esta rehabilitación se repararon las cubiertas, se mejoró la instalación eléctrica, se construyó un nuevo pavimento en la zona de autobuses y se instalaron paneles informativos digitalizados. Aunque el PP lo calificó de "chapuza" entendiendo que no se habían mejorado por ejemplo los problemas de goteras.

El nuevo intento fue en 2023 con el empeño del Gobierno de Julio Millán (PSOE) de rehabilitar el hotel Rey Fernando con la intención de la empresa Hotel Condestable Iranzo S.A., algo que no se ha llegado a materializar con la entrada del nuevo Gobierno del PP el año pasado.

El 27 de abril el pleno del Ayuntamiento realizó una moción que contó con el respaldo unánime, en la que no solo se insta al Gobierno, sino también a la Junta para realizar el proyecto de la estación intermodal. Se le demanda que respalde el plan con la firma de un convenio de colaboración con similares condiciones económicas a las que ya tienen otras ciudades andaluzas. La siguiente cuestión es: ¿Darán solución las diferentes administraciones o la decadencia del edificio seguirá el ritmo de los años como en estos últimos 18?