La calle donde mejor se tapea en Jaén: un laberinto medieval con tabernas del siglo XIX

Jaén/Comer en Jaén se ha convertido en todo un acontecimiento dados los continuos éxitos gastronómicos a los que nos vienen acostumbrados nuestros chefs y restaurantes locales. Pero lejos de esos menú degustación, hay quien todavía prefiere perderse por el callejero de la ciudad en busca de esas tapas con las que alimentar el espíritu y el estómago. Y si hay un claro referente para dejarse caer por las tradicionales tascas de nuestra tierra es, sin lugar a dudas, la calle Arco del Consuelo.

Se trata de una pequeña vía casi laberíntica que mantiene su trazado medieval incluso en el empedrado del suelo. La sensación de pasear entre sus paredes enclavadas a apenas una manzana de la catedral supone un atractivo inigualable para visitar Jaén por primera vez. Y si a ello sumamos el hecho de que esta calle cuenta con las dos tabernas más antiguas de la ciudad, no hay mayor excusa para caer en la tentación de hacer una parada obligatoria en ella.

Tanto 'El Gorrión' como 'La Manchega' pueden presumir de ostentar el título de haber vivido en tres centurias diferentes, pues esta última lleva en pie ni más ni menos que desde 1886. Entrar en estas tascas puede ser lo más parecido a un viaje en el tiempo, más aún si se acompaña de una buena tapa como las clásicas migas o las aceitunas. Cualquier opción en la barra de una u otra puede ser un escaparate ideal para enseñar la ciudad al turista que nos acompañe.

Sin embargo, la lista de bares y restaurante que pueblan sus fachadas es aún más extensa de lo que cualquier podría imaginar a simple vista. Por desgracia, en los últimos años también se han perdido algunas de las firmas más reconocidas por la sociedad jiennense. Destacan, entre otros, el Mesón 'El Tostón' o la taberna 'Alcocer', otras dos opciones de lo más versátiles para tomar una caña o una copa de vino y acompañar la bebida de un tapeo prolongado con toda clase de embutidos.

En sus esquinas y ángulos encontramos igualmente otros muchos rincones como la 'Taskberna', donde la cocina tradicional toma el mando de la carta, o el conocido 'Bar82'. En este puedes ir en compañía de amigos y familiares para acompañar la experiencia de un buen vino con las raciones y tapas más típicas de la zona. La improvisación, en este caso, puede ser un buen aliado para quienes buscan dejarse conquistar.

Con este breve recorrido conviene tomar nota y apuntar esta calle en la lista de imprescindibles para quienes buscan la tapa fácil y efectiva para abrir boca. Este paraíso puede que haga honor a su nombre y se antoje todo un consuelo a la hora de huir del trasiego urbano más propio de estos días.