Los albergues para temporeros de Jaén cierran más pronto que nunca por falta de empleo en el olivar

Provincia

A falta de los datos oficiales se prevé que la llegada de migrantes fue muy reducida en comparación con los 4.000 de una campaña normalizada

Se elevan a cuatro los albergues para temporeros en funcionamiento con la apertura de Baeza y Villacarrillo

Sequía extrema: los pantanos de Jaén están un cinco por ciento más secos que hace un año

Albergue de Alcalá La Real.
Albergue de Alcalá la Real. / E. P.
Ginés Donaire/Efe

09 de enero 2024 - 14:10

Los albergues para temporeros de la aceituna de Jaén han echado el cierre ante la escasa afluencia de usuarios por falta de empleo en el olivar debido a la sequía. Se trata de la fecha más prematura de cierre desde que hace tres décadas se implantó esta red de alojamiento pionera en el país.

Este año han sido 13 los albergues abiertos en los municipios de Alcalá la Real, Andújar, Jaén, Mancha Real, Martos, Porcuna, Torredelcampo, Torredonjimeno, Úbeda, Villacarrillo, Villanueva del Arzobispo, Alcaudete y Baeza, con una capacidad global de unas 500 plazas.

El albergue de Alcaudete fue el primero en cerrar su albergue el pasado 12 de diciembre, seguido del de Baeza el día 20. Y el último que ha cerrado sus puertas ha sido el centro de Torredonjimeno, que lo ha hecho hoy martes. "Llevamos cinco años con una baja ocupación en los albergues, los tres primeros debido al covid y los dos últimos por las campañas muy cortas de la recogida de la aceituna, lo que ha traído a muchos menos trabajadores foráneos”, señala a Efe Manuel Álvarez, secretario del Foro Provincial para la Integración de las Personas de origen Migrante.

Peor registro desde que se implementó esta red de alojamientos

Ya en los últimos días del año 2023 la ocupación media de los albergues apenas llegaba al 20 por ciento. Se trata del peor registro desde que se implantó esta red de alojamientos, que da cobijo, de forma transitoria, a los jornaleros que llegan en busca de trabajo al olivar.

En ellos, los temporeros pueden estar hasta un máximo de cinco días mientras encuentran trabajo en alguno de los tajos olivareros. El año pasado, donde también cayó el empleo por la sequía, la ocupación media de los albergues no pasó del 34 por ciento.

El albergue de la capital jiennense, el de mayor capacidad con 200 plazas, también ha cerrado sus puertas, aunque ahora sigue funcionando como dispositivo de atención a personas sin hogar, como ha recordado el gerente del área de Asuntos Sociales, Pedro Pajares.

Reducción de la llegada de migrantes

Por segunda campaña consecutiva, la sequía ha provocado un recorte brutal de la cosecha oleícola y en muchas comarcas productoras apenas se llegará a un tercio de la producción media. Los usuarios mayoritarios de los albergues son migrantes temporeros que llegan cada año a una región donde este año, según el aforo de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía, se prevén 5,7 millones de jornales en las tareas de recolección de la aceituna.

Pero este año, a falta de los datos oficiales, la llegada de migrantes quedará muy lejos de los 4.000 que llegaban de media en una campaña normalizada, o de los 8.000 que fue el pico más alto en los años de más producción

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