¿Quién es Fran Ceacero, el linarense que actúa como portavoz de las monjas de Belorado?

Las monjas cismáticas del monasterio de Santa Clara, en Belorado, continúan en el foco mediático después de segregar sus funciones de la doctrina católica. El apoyo de su abadesa a la tesis sedevacantista defendida por un tal Pablo de Rojas en su Pía Unión de San Pablo Apóstol ha roto los esquemas del arzobispo de Burgos, Mario Iceta, quien ve en estas acciones una absoluta estrategia por parte del falso obispo que las lidera. Sin embargo, De Rojas, quien fuera excomulgado en el año 2019 por tachar de usurpador al Papa Francisco y seguir la estela de ciertas organizaciones sectarias cercanas al Palmar de Troya, no se encuentra solo detrás de todo este movimiento. Le acompaña en voz y voto otro linarense: Francisco Ceacero, un curioso sacerdote con un llamativo currículum como coctelero en Bilbao.

El pequeño Fran conoció como monaguillo a De Rojas en su ciudad natal, durante una procesión del Corpus Christi. Según recoge El Nuevo Observador, coincidirían más tarde como acólitos en la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, entablando una amistad duradera hasta hoy. A pesar de que afirma sentir su vocación por la oración desde bien temprano, este cura ordenado en 2012 dejaba de lado su alzacuellos durante la nocturnidad para remontar su carrera profesional como coctelero en las barras del Gin Fizz, en Bilbao. Con varios reconocimientos a su espalda, Ceacero presume de haber fundado la primera escuela de coctelería del País Vasco y haber sido galardonado en el campeonato al mejor gin tonic original celebrado en San Sebastián, entre otros premios.

El padre Don José, al servicio de las clarisas

Curiosamente, ese barman prácticamente olvidado ahora se hace llamar Don José bajo la sotana, y actúa como portavoz de las clarisas contrarias al Vaticano. Su salto a los medios de comunicación la pasada semana ha bastado para concretar su perfil megalómano, casi en una imitación de la imagen que ofrece su amigo y fundador de la Pía Unión, Pablo De Rojas. Entre ambos tensionan la difícil decisión del arzobispo de Burgos para decretar la posible excomunión de sus monjas adeptas ante las últimas declaraciones efectuadas a través de un comunicado oficial. En el mismo tachaban de herejes a todos los pontífices posteriores a Pío XII y manifiestan su deseo de seguir el ideario de Don Pablo y su fundación.

Desde luego, Fran Ceacero parece no inmutarse ante los cámaras durante su oratoria. Su formación como filósofo en Alemania probablemente contribuya a afianzar su convicción por el proyecto que encabeza junto a su compañero. En cuanto a los métodos de financiación de la Pía Unión mantienen la incógnita de los fondos que recibe, entre los que sobresale un importante patrimonio inmobiliario. Lo que es evidente es que el salto del gin tonic al vino consagrado parece traer de cabeza a la Iglesia Católica, que masca la tragedia de esta polémica asociación en la que están viendo manchada, sin quererlo, su propia reputación.