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Carmen Pérez
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I Salón de Innovación y Tecnología del Agua
El secretario genera de Feragua, Pedro Parias, presentó en este foro un proyecto innovador, pionero en Europa, para evaluar la aplicación al cultivo del olivar de aguas regeneradas, es decir aguas residuales tratadas y recuperadas. Denominado “Reutivar”, el proyecto tiene como objetivo optimizar el tratamiento de regeneración de aguas al uso específico del olivar. Se propone también desarrollar un sistema de precisión de fertirriego -fertilización más riego-, ajustado también a este cultivo y al uso de aguas regeneradas.
Pedro Parias, que coordina el proyecto, explica que el objetivo final es impulsar el desarrollo sostenible del olivar andaluz mediante la mejora y adaptación a este cultivo del uso de aguas regeneradas, una de las estrategias básicas alentadas por la Unión Europa para gestionar los desequilibrios hídricos.
Liderado por Feragua, el Centa, la Universidad de Córdoba y la Comunidad de Regantes del Tintín, “Reutivar” es un proyecto de innovación cofinanciado por la Junta de Andalucía y la Unión Europea con fondos Feader 2014-20, que ha sido seleccionado por la Consejería de Agricultura en el marco de las ayudas de la Línea Olivar para el funcionamiento de grupos operativos de la Asociación Europea de Innovación (AEI).
En él participan también, como colaboradores externos no beneficiarios, la Consejería de Medio Ambiente, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, las empresas de equipos de riego Regaber y Toscano y la sociedad Aguas de Montilla, que gestiona la EDAR de Montilla, desde donde se sirve el agua depurada a la Comunidad de Regantes del Tintín.
También Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía participó en el Salón. El técnico responsable de I+D+i de la federación, César Díaz Barroso, expuso el trabajo que está llevando a cabo el grupo operativo conformado por Eurocastell La Caña, el Centro Tecnológico de la Industria Auxiliar, Postcosecha y Envasado Hortofrutícola (Tecnova), el centro de Investigación y Desarrollo del Alimento Funcional , el Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (Ifapa) y la federación, a través de su oficina en Granada.
El proyecto, basado en la economía circular, persigue reducir los consumos de agua y fertilizantes en cultivos hortícolas mediante la implementación de técnicas avanzadas, que garanticen la calidad, el sabor y las cualidades organolépticas de los productos, al tiempo que la sostenibilidad medioambiental.
Para ello, la experiencia se está centrando en el cultivo de tomate, en el que se están llevando a cabo diferentes estrategias con el fin de lograr el máximo aprovechamiento de los recursos hídricos.
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