Ceres Andalucía ha realizado una campaña para impulsar el empoderamiento de la mujer
La Voz Invitada
Ni discretas, ni silenciosas
Satisfacción, ilusión y motivación para seguir trabajando por el empoderamiento de la mujer rural y por lograr una sociedad en la que la igualdad plena sea una realidad, son las sensaciones y el buen sabor de boca que nos ha dejado la campaña que, desde la Federación de Asociaciones de Mujeres del Medio Rural Ceres Andalucía, hemos llevado a cabo por todas las provincias andaluzas, con el apoyo necesario del Instituto Andaluz de la Mujer –IAM-.
La Campaña de Sensibilización para la Participación Social de Mujeres del Medio Rural “Nos formamos, nos expresamos, nos empoderamos, participamos” ha recorrido las zonas rurales de Andalucía durante 2021 con un objetivo claro: formar para comunicar, comunicar para participar y participar para liderar y estar presente en la toma de decisiones clave en los ámbitos rurales.
Y es que las mujeres tenemos voto, pero aun nos falta tener más voz, especialmente en el medio rural. En nuestra lucha continua por la igualdad y visibilización de las mujeres rurales, queremos dar un paso más, importante y determinante. Porque no queremos ser ni discretas ni silenciosas.
Sí, hemos avanzado. No permitimos que nos ninguneen cuando se toman decisiones o se debate en la familia, en una asociación u organización, en la cooperativa o en el bar del pueblo, por ejemplo… Ahora no sólo hablamos, sino que participamos y lideramos. Y es que la mujer rural es el eje del cambio, un motor para el desarrollo socioeconómico del medio rural. Es clave para el futuro de nuestros pueblos.
Ésta es nuestra hoja de ruta y, para ello, desde Ceres Andalucía apostamos de manera decidida por favorecer ese impulso a la participación y liderazgo de las mujeres rurales, poniendo a disposición las herramientas necesarias para facilitar ese proceso de empoderamiento. Y, en este sentido, es fundamental la formación y, más concretamente la formación en habilidades comunicativas que nos ayuden a expresarnos sin complejo, con libertad y fortaleza.
Las técnicas de comunicación son una herramienta que da respuesta a la sensación latente de frustración en la intervención en espacios públicos, en las que las mujeres se pueden incómodas por su falta de experiencia en las intervenciones.
Formación
Hablar en público, al igual que otras experiencias en la vida, demanda habilidades que no poseemos de forma innata. Eso significa enfrentarnos a emociones que pueden sorprendernos o resultarnos desagradables, pero la respuesta no tiene por qué ser la evitación o el bloqueo. Hablar de manera eficaz no es algo que se herede genéticamente, todos podemos aprender y perfeccionar esta actividad hasta sentirnos cada vez más a gusto, incluso crear un estilo, una forma de hablar ante los demás, personal y propia. Los buenos oradores no nacen, ¡se hacen! Por este motivo, hemos centrado la formación de la campaña en ofrecer técnicas psicológicas necesarias para afrontar intervenciones públicas en diversos ámbitos y ante distintos tipos de auditorios.
Así, las mujeres que han participado durante todo el pasado año en nuestras distintas actividades formativas, cuentan ahora con una caja de herramientas a la que acudir siempre que necesiten expresarse en público, venciendo bloqueos y generando sinergias entre lo rural y lo urbano.
El pasado mes de enero se ponía el colofón a esta campaña formativa y de sensibilización en Motril (Granada), con la celebración de unas jornadas en las que se puso en común lo aprendido durante las reuniones provinciales, compartiendo experiencias y vivencias entre las asistentes.
Durante estas jornadas finales, que se desarrollaron en la tarde del 18 y durante todo el día del 19 de enero, pudimos disfrutar de diversas actividades formativas como los “Talleres de herramientas para vencer el miedo para hablar en público”, las “Mesas interactivas de experiencias” o la ponencia “Participación Social en el Medio Rural”, culminando el encuentro con el “Taller de Intercambio de Semillas”, en el que compartimos e intercambiamos semillas como acto simbólico, y también con la finalidad práctica de compartir trabajo y experiencias. Además, celebramos un emotivo acto de relevo generacional en el que madres e hijas rurales intercambiaron semillas a modo de representación y de apoyo para su continuidad en el sector agrícola y ganadero.
Empoderamiento de la mujer
Todo suma. Pero no perdamos la perspectiva, que el camino es largo. Seguimos viviendo en una sociedad donde impera lo masculino, el patriarcado. Se sigue identificando al hombre en el espacio público y a la mujer en el privado. Por eso es imprescindible seguir potenciando el empoderamiento, que las mujeres rurales recuperemos la autoestima, la capacidad de confiar, la capacidad de pensar, hacer y decidir por nosotras mismas, lo que mejor consideremos para nuestras vidas.
Se trata de trabajar para transformar esas relaciones de dominación en relaciones de sinergia, de complementación. Muchos son los hombres que apoyan nuestro paso adelante. Compartamos también con ellos nuestro camino. Sin participación no existirá empoderamiento y el empoderamiento no existe sin la participación. Por eso, insistimos en la formación de las mujeres para su mayor visibilización. Con una mayor participación estaremos más empoderadas, seremos más independientes, más iguales y también descenderán las víctimas de violencia de género al no depender económicamente de nadie.
Por eso desde Ceres Andalucía luchamos y trabajamos para estar cada día más empoderadas. Las mujeres producen, reproducen y sostienen la vida en nuestros pueblos y ciudades. Si las mujeres paran, se para el mundo. Sigamos, por tanto, a por más y mejor.
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